-¡Me queréis explicar como habéis podido destrozar así una propiedad de la academia!- Gritaba Michaela histérica
-No a sido aposta, simplemente nos defendíamos- Contestó Phoebe
A pesar de lo diminuto que era el despacho de la directora, Rose, Chris, las I.M.C.A.P., Josh, Scarlett, Eric y Jessica cabían perfectamente
-¿Y queréis que me crea que una sola alumna a conseguido poner en jaque a nueve de los mejores alumnos y que una chica que descubrió su Don hace dos días consiguió vencerla a ella y a un dragón creado a partir de una polimericación de un solo ataque?-
-Dicho así si que suena algo increíble-
-Bien, Anais quedaté. Los demás iros-
-Suerte- Le susurró Phoebe mientras salía
Anais parecía terriblemente preocupada. Había hecho muchas cosas mal en su vida pero ninguna parecida a esta.
-Anais, ¿Por qué has hecho eso?-
-No lo se directora- Contestó - Desde que era pequeña, a veces, pierdo el control de mi cuerpo y me vuelvo completamente violenta-
-Me preocupa Anais, de verdad, si no te puedes controlar puedes hacer mucho daño. ¿Sabias que el profesor Jensen era antes un ángel?-
-Hay rumores pero nadie se lo cree-
-Pues es cierto. al pobre le castigaron a vivir una vida eterna alejado de su hogar y sin ningún rastro de poder angelical en su cuerpo. Yo, que desciendo de ángeles, le acogí en mi academia para que no muriera en la calle-
-Es una historia muy conmovedora pero, ¿Qué tiene que ver conmigo?-
-¿Sabías también que los ángeles son entrenados para controlar y reprimir sus sentimientos?-
-No, no lo sabía-
-Todos los miércoles ve a su despacho y entrena toda la tarde con él. No te preocupes por los deberes, tienes permiso mio pero los trabajos y los exámenes debes hacerlos igual-
-De acuerdo, si así no me expulsa asistiré a esas clases-
-Estupendo-
-Hasta luego Señorita Deveraux-
Cuando salió del despacho Phoebe la esperaba junto con Mary, Icia y Cat.
-¿Qué tal te ha ido?- Preguntó Phoebe
-Fatal, tengo que dar clases con Jensen, ¡Con lo que le odio!-
-Seguro que no es para tanto Anais, es por tu bien- La animó Cat
-Pero los miércoles tengo entrenamiento de fútbol, así no podré seguir en el equipo-
-Bueno, puedes seguir practicando los sábados con nosotras y los martes tenemos entrenamiento con los de séptimo- Dijo Mary
-Vale-
-Venga, que en cinco coma treinta y tres segundos va aparecer Caroline y nos va a castigar por no estar en el comedor- Dijo Icia
Mientras las I.M.C.A.P. continuaban su camino un chico las espiaba escondido detrás de una esquina. Cuando se alejaron lo sufiente salió de su escondite y rió.
-El plan está en marcha- Dijo
Mientras se alejaba una llama morada, casi negra, quemaba un papel en el fondo del pasillo.
-No a sido aposta, simplemente nos defendíamos- Contestó Phoebe
A pesar de lo diminuto que era el despacho de la directora, Rose, Chris, las I.M.C.A.P., Josh, Scarlett, Eric y Jessica cabían perfectamente
-¿Y queréis que me crea que una sola alumna a conseguido poner en jaque a nueve de los mejores alumnos y que una chica que descubrió su Don hace dos días consiguió vencerla a ella y a un dragón creado a partir de una polimericación de un solo ataque?-
-Dicho así si que suena algo increíble-
-Bien, Anais quedaté. Los demás iros-
-Suerte- Le susurró Phoebe mientras salía
Anais parecía terriblemente preocupada. Había hecho muchas cosas mal en su vida pero ninguna parecida a esta.
-Anais, ¿Por qué has hecho eso?-
-No lo se directora- Contestó - Desde que era pequeña, a veces, pierdo el control de mi cuerpo y me vuelvo completamente violenta-
-Me preocupa Anais, de verdad, si no te puedes controlar puedes hacer mucho daño. ¿Sabias que el profesor Jensen era antes un ángel?-
-Hay rumores pero nadie se lo cree-
-Pues es cierto. al pobre le castigaron a vivir una vida eterna alejado de su hogar y sin ningún rastro de poder angelical en su cuerpo. Yo, que desciendo de ángeles, le acogí en mi academia para que no muriera en la calle-
-Es una historia muy conmovedora pero, ¿Qué tiene que ver conmigo?-
-¿Sabías también que los ángeles son entrenados para controlar y reprimir sus sentimientos?-
-No, no lo sabía-
-Todos los miércoles ve a su despacho y entrena toda la tarde con él. No te preocupes por los deberes, tienes permiso mio pero los trabajos y los exámenes debes hacerlos igual-
-De acuerdo, si así no me expulsa asistiré a esas clases-
-Estupendo-
-Hasta luego Señorita Deveraux-
Cuando salió del despacho Phoebe la esperaba junto con Mary, Icia y Cat.
-¿Qué tal te ha ido?- Preguntó Phoebe
-Fatal, tengo que dar clases con Jensen, ¡Con lo que le odio!-
-Seguro que no es para tanto Anais, es por tu bien- La animó Cat
-Pero los miércoles tengo entrenamiento de fútbol, así no podré seguir en el equipo-
-Bueno, puedes seguir practicando los sábados con nosotras y los martes tenemos entrenamiento con los de séptimo- Dijo Mary
-Vale-
-Venga, que en cinco coma treinta y tres segundos va aparecer Caroline y nos va a castigar por no estar en el comedor- Dijo Icia
Mientras las I.M.C.A.P. continuaban su camino un chico las espiaba escondido detrás de una esquina. Cuando se alejaron lo sufiente salió de su escondite y rió.
-El plan está en marcha- Dijo
Mientras se alejaba una llama morada, casi negra, quemaba un papel en el fondo del pasillo.
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